top of page
Buscar

Las imperfecciones nos mantienen vivos: Amate tal como eres

¿Qué vas a hacer cuando alcances la perfección, dejar de vivir? Amarse a sí mismo es estar agradecidos y felices con lo que somos, sin creernos más o menos, reconociendo todo lo que nos hace únicos. Solo cuando nos amamos podemos comenzar a trabajar en nuestra mejor versión, mientras nos divertimos por el camino y nos reímos hasta de las metidas de pata.

Te comparto algunos de los pasos que he dado para fortalecer el amor propio día a día y ser feliz:

CONOCE tu identidad y propósito: Haz una lista de todo lo que te gusta de ti, tus valores, habilidades, así como de tus limitaciones, “defectos” o aspectos a mejorar.

Reconoce tu propósito: Si ya lo sabes, recuérdalo siempre porque éste te da la fuerza para seguir todos los días, especialmente en los momentos más difíciles, cuando llega la desmotivación. Si aún no lo conoces, revisa cuáles son tus fortalezas, los temas que te apasionan, cómo puedes aprovecharlos para dejar huella en la sociedad y finalmente cómo rentabilizarlos. La suma de todo esto te llevará a ver más claramente tu propósito.

ACÉPTATE: Cuando tengas esa lista en tu mano acoge con amor y gratitud, tanto lo que te gusta como lo que no. Recuerda que todo es para bien y mira los “defectos” como oportunidades para construir tu mejor versión.

RÍETE de ti mismo: Cuando algo no salga como esperabas, te caigas, cometas un error o te contradigan, acepta que puedes equivocarte, que todos estamos aquí para aprender, tómalo con tranquilidad y mírate con amor para abrir la mente, cambiar de perspectiva y volver a empezar.

PERDÓNATE a diario: Muchas veces actuamos en contra de nuestra voluntad o simplemente hacemos cosas que nos afectan física, emocional y/o mentalmente. Es necesario reconocerlo para vaciar sentimientos de remordimiento o ira en contra de nosotros mismos y a cambio llenarnos de amor, compasión y perdón.

AGRADECE quien eres en realidad: Recuerda todos los días lo que te gusta de ti y tus limitaciones, esto te permitirá ser realista y agradecer que todo es para bien y tienes la oportunidad de construir tu mejor versión. Por lo general cuando pensamos solo en lo bueno, lo que nos gusta de nosotros mismos, nos elevamos tanto que al primer error nos caemos muy fuerte y luego es bastante difícil levantarnos. Por eso hay que mantener un equilibrio y amar nuestras fortalezas y debilidades.

DEFINE límites: Busca espacios adecuados para sostener una conversación con personas que quieren atacar tu identidad y exige con amor y respeto tus derechos, honrando los de los demás y sin sentimientos de culpa. Aléjate de personas con baja autoestima porque eso es contagioso.

ABRAZA los halagos: Abraza con amor y gratitud las palabras lindas que dicen sobre ti o los regalos que te envían, disfruta de lo bonito que hay en ti, de tus cualidades, fortalezas y virtudes. La mejor forma de hacerlo es agradecer.

CONSTRUYE tu mejor versión: ¡Ilusiónate con lo que viene porque es lo mejor! Invierte tiempo y energía en mejorar hábitos, transformar creencias limitantes en otras que te empoderen, alcanzar sueños y entrenar tu cuerpo, espíritu y mente para ser feliz. Solo así podrás dejar huella en el mundo e impactar positiva y amorosamente tu entorno.

Finalmente, las personas que aman a los demás es porque se aman, que aceptan es porque se aceptan, que toleran es porque se toleran, que admiran es porque se admiran y que aceptan a los demás es porque se aceptan a sí mismos. Si te falta alguna de estas características tienes una oportunidad de comenzar a trabajar en tu amor propio y así dar el primer paso para ser feliz.

Ámate tal como eres, lo perfecto te aleja de lo bueno ;)

bottom of page